Vamos a comer a este restaurante. Le tenía ganas y hoy es el día.
Nos ubican en una mesa y nos dejan leyendo las cartas. Nos vana a tener que ayudar con los vinos porque no son conocidos para ninguno de nosotros. Dado que vamos a tomar platos muy diversos, nos inclinamos por un cava. Nos recomiendan Segunyola de Celler Mas Candí. Un cava 100% Xarelo, De burbuja fina que al principio nos hace poner un poco de mala cara pero que con el paso del tiempo se convierte en un buen compañero de mesa.
Pero vamos a lo importante.
Ladrillo cristalizado. Un filete de anchoa del Cantábrico con crema de queso sobre un papel de arroz en forma de ladrillo. Siempre pienso que una buena anchoa se merece la soledad, como mucho, unas gotas de un buen aceite de oliva virgen extra.
Nos traen unos panecillos calentitos para que podamos probar el aceite de oliva virgen que nos dejan en la mesa: 565 MSMN un aceite de alicante (Benillup) que nos enamora con ese toque de manzana ácida que tiene.
Tartar de salmón marinado al 'mojito' con caldo de dashi de piel de bonito y alga espirulina. Plato muy estético, fresco y rico.
Berenjenas marinada al miso con babaganush. Rica berenjena con más berenjena con ese toque a humo. Muy buen plato.
Tartar de dorada curada y salsa de siracha sobre tuétano. Para amantes del tuétano ya que este se lleva por delante todo lo que encuentra. Delicioso pero bien podría haberse presentado en solitario.
Pulpo a la brasa con burrata ahumada. El pulpo tierno y sabroso y junto a la burrata el plato era para una delicia.
Esta vez no perdonamos ni el postre; milhojas con crema pastelera de pistacho. Dulce final de comida.
Buen sitio para una comida buena en una excelente compañía.
(Esta foto se la he mangado a Paco Pastor ;-) )